Se aproximan las fechas para que se abra el plazo para elegir centro educativo, y es cuando a muchos padres se les presentan muchas dudas: ¿Qué colegios escoger? ¿ en base a qué criterios? Es cuando los padres empiezan el tour por aquellos colegios que tiene jornadas de puertas abiertas, pero está claro que las instalaciones, que es principalmente lo que van a ver, no lo es todo. Junto con esa jornada de puertas abiertas suele explicarse un poco el funcionamiento del centro, la filosofía del equipo que en él trabaja, y todas las dudas que los padres plantean.
Al acabar la ruta de colegios los padres siguen teniendo más dudas que cuando comenzaron, porque está claro que en una visita de unos minutos no se resuelve si ese será el centro más conveniente o no. Se debe decidir si se quiere una escuela con una educación más “convencional” o por el contrario apostar por una que tenga enfocado su concepto de educación hacia las diferentes corrientes alternativas que han ido surgiendo en los últimos años. Colegios que siguen una metodología distinta a la oficial, que no consideran que los exámenes sea lo más importante en el expediente académico de un alumno, con más libertad de horarios, sin tener tan delimitados los tiempos `para cada actividad, sino dejando que las cosas surjan de una manera más natural, respetando el ritmo del alumnado, que al fin y al cabo es el agente final hacia el cual está enfocada la educación.
Lo que está claro es que muchos de los aprendizajes que se dan en la escuela no resultan útiles para la vida diaria, o jamás se van a utilizar; es por ello que cada vez más padres demandan una educación más “real”, más centrada en las verdaderas necesidades de los niños, siguiendo su evolución natural y no forzando la adquisición de conocimientos. Nuestra sociedad requiere unos conocimientos que no siempre se adquieren durante la etapa escolar, y por ello mucho centros han cambiado su planteamiento para adecuarlo a las necesidades que se demandan. Desde el colegio se potencia siempre el trabajo en equipo, pero esto no siempre es así en la realidad, se tiende a individualizar al alumno, se sigue el modelo de explicación por parte del profesor, tareas a realizar por el alumno en solitario. No se fomenta el trabajo junto con el resto de compañeros, tan enriquecedor y difícil a la vez, pero que les hará tomar conciencia a los niños del respeto hacia las opiniones de los demás, aprendiendo también a tomar decisiones consensuadas.
Ante los altos índices de fracaso escolar algo hay que hacer o cambiar; pero es un cambio que tiene que hacerse de manera conjunta entre gobierno, centros educativos y familias, las cuales, la gran mayoría, viven estancadas en una educación pasada y obsoleta.
¿Crees que los colegios necesitan un cambio importante en su planteamiento educativo?
¿Se aceptaría de buen grado una escuela sin asignaturas y exámenes?
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