El concepto de salud es tan amplio que no lo tenemos bien planteado, puesto que supone pasar de una concepción individual a otra colectiva, adoptando una actitud preventiva más que asistencial y actuando de manera conjunta con el resto de la sociedad; y para ello hay que informarse y formarse, teniendo la educación un papel fundamental a este respecto.
Normalmente la información que se da sobre temas referidos a la salud suele ser a través de campañas en épocas puntuales o hechos concretos. En el caso concreto de colegios o centros educativos se dan unas nociones básicas, sobre todo en los primeros años, pero después si que queda un poco en el olvido, salvo que el profesor de educación física decida incluirlo dentro del currículo de su asignatura. Hace unos años surgió el termino Educación para la Salud, ámbito que englobaba lo intelectual, lo psicológico y lo social, en un intento de concienciar a las personas en la toma de decisiones hacia un cambio que afecte a su bienestar personal y familiar, repercutiendo este en la sociedad en la cual viven.
Pero con el paso del tiempo se ha observado que contar con Educación para la Salud no es suficiente, puesto que el individuo recibe una información de manera pasiva, pero no se fomenta lo suficiente la manera de poner en práctica lo escuchado. Contamos con una tasa de personas mayores de 60 años bastante considerable, y si bien es necesario formar a las nuevas generaciones no debemos olvidarnos nunca de las anteriores, porque cualquier momento es bueno para el cambio.
El personal sanitario no tiene la exclusiva competencia sobre estos temas, es simplemente un mediador o transmisor de la información, y es cuando entra en juego la educación, con sus objetivos y herramientas, para poder dar la importancia que este tema tiene. Se trata de crear sentido de la responsabilidad en el individuo, lo cual no será tarea fácil, y la mejor herramienta para esto es la perseverancia. Puede que las personas a determinada edad tengamos una serie de hábitos ya tan adquiridos que nos sea complicado cambiarlos, pero no es imposible, y las personas nos adaptamos a lo nuevo mejor de lo que creemos. Está demostrado que ahora mismo se vive más años por todos los cuidados que le damos a nuestro cuerpo, con lo cual no lo estaremos haciendo tan mal. Y es que cuerpo y mente envejecen, y se trata de darles una oportunidad de mantenerse activos, para que ese envejecimiento se vea frenado, sea más paulatino y no suponga un problema para la persona.
Y es que como siempre la educación es la solución a todos los temas.